El método es el resultado de un estudio dirigido por el doctor Aviv Mezer y un equipo de el centro de Ciencias del Cerebro de la Universidad Hebrea de Jerusalén que fue publicado en la reconocida revista Nature Communications.

Según el estudio, los exámenes de resonancia magnética podrían servir en el futuro para detectar de forma no invasiva enfermedades neurológicas como el Alzheimer y el Parkinson e incluso algunos tipos de cáncer.

Los investigadores explicaron que la nueva técnica «podría permitir a los doctores comparar escaneos cerebrales tomados a través del tiempo de un mismo paciente y de esta forma diferenciar entre tejidos sanos y enfermos en el cerebro, sin procedimientos invasivos o peligrosos como las biopsias de tejido cerebral».

Si bien la técnica actual aún no permitiría la detección directa de enfermedades neurodegenerativas, el equipo estaría desarrollando un método para transformar las resonancias magnéticas de una cámara diagnóstica que saca imágenes de los órganos, huesos y nervios, en un dispositivo que podría registrar cambios en la composición biológica del tejido cerebral.

De esta forma los doctores podrían determinar si los cambios en el cerebro de un paciente se deben al envejecimiento o debido al desarrollo de enfermedades como el Parkinson y el Alzheimer.

Mezer comparó esta nueva forma de leer la resonancia magnética con un análisis de sangre: «Cuando realizamos un análisis de sangre, nos muestra el número exacto de glóbulos blancos en nuestro cuerpo y si ese número es más alto de lo normal debido a una enfermedad. Este nuevo análisis proporciona dicha información para el cerebro».

«Sabemos que cuando observamos el cerebro post-mortem hay una gran diferencia en las macromoléculas en diferentes enfermedades. La esperanza es que con nuestro nuevo enfoque, podamos determinar si un paciente simplemente está envejeciendo o está desarrollando una enfermedad neurodegenerativa, como el Alzheimer o el Parkinson«, explicó a The Times of Israel Mezer.

«La nueva técnica de resonancia magnética proporcionará una comprensión crucial de cómo envejecen nuestros cerebros. Cuando escaneamos el cerebro de pacientes jóvenes y mayores, observamos que diferentes áreas del cerebro envejecen de manera distinta. Vimos cambios importantes en la composición molecular de la materia gris en sujetos más jóvenes versus mayores», agregó.

Mezer considera que a través del nuevo método, los pacientes obtendrán diagnósticos correctos antes, acelerando el tratamiento, lo que podría ayudarlos a mantener una mejor calidad de vida por más tiempo.

Aunque el estudio se centró en imágenes del cerebro, los investigadores creen que también se puede ajustar y aplicar a la resonancia magnética de otros órganos del cuerpo.

El modelo matemático desarrollado por los investigadores ya se puede aplicar hoy en todos los escáneres de resonancia magnética para proporcionar a los médicos una imagen más completa del cerebro.

Fuente: La Vanguardia

 

 

 

 

 

 

 

 

Fuente: Infobae