Mayores de la asociación Alzheimer León y escolares del Colegio Leonés Jesús Maestro se han subido hoy al escenario en León para estrenar el montaje teatral ‘Caperucita en Manhattan’. La cita ha tenido lugar en el Auditorio Ciudad de León en dos pases a lo largo de la mañana: a las 10.30 y a las 11.45 horas.
En total son 8 mayores usuarios de Alzheimer León y 8 niños (6º Primaria, 1º, 2º y 4º de la ESO del Colegio Leonés Jesús Maestro), acompañados por voluntarios y profesionales de la asociación, todos ellos integrantes del Grupo de Teatro Intergeneracional de Alzheimer León. Desde hace meses trabajan en esta puesta en escena. En el patio de butacas, acompañando al público, estuvieron presentes familias de Alzheimer León, miembros de la comunidad educativa, escolares, colaboradores de la asociación y representantes de distintas instituciones.
El proyecto, dirigido por Sergio Martínez Diaño, ha sido posible gracias a la colaboración del Ayuntamiento de León.
Esta obra se estrenó recientemente en Madrid, en el municipio de Fuenlabrada, donde en ediciones anteriores Alzheimer León ya ha desarrollado proyectos teatrales con centros educativos y de mayores de la zona.
Qué es el Teatro Intergeneracional de Alzheimer León
En el Grupo de Teatro Intergeneracional de Alzheimer León las únicas distancias que separan a nuestros protagonistas son las que marca el propio escenario. Ni la edad, ni la enfermedad, que ya se asoma en estadíos iniciales, ni la inexperiencia ponen freno a este emocionante ejercicio de superación, trabajo en equipo y convivencia entre generaciones. De hecho, se trata de uno de los programas más conmovedores y exitosos de la institución.
Para poner en escena una obra de teatro, niños y mayores comparten horas de ensayo que se convierten en una terapia en mayúsculas. Exige en mayores y en pequeños un esfuerzo de aprendizaje creativo, obliga a desarrollar la concentración, a trabajar en equipo y sentirse integrado en el mismo, enseña a comprometerse y rescatar capacidades, favorece el desarrollo de la autoestima y la confianza en uno mismo y en los demás. Nuestros mayores son muy receptivos a esta actividad artística porque les hace sentirse parte de la sociedad, perciben que se les tiene en cuenta y que vuelven a ser valorados por su trabajo.