No hay mejor forma de conocer el funcionamiento de un centro que compartir unas horas dentro, cumplir con las rutinas, participar en las actividades y ver de cerca cómo es un día cualquiera junto a usuarios y trabajadores.
Así nacieron en abril y mayo estas jornadas tan enriquecedoras que abrieron las puertas de nuestro centro de día a las familias. Durante la visita, conocieron al profesional de referencia y al equipo técnico, participaron en las actividades terapéuticas y se integraron en los grupos. También hubo tiempo para intercambiar impresiones y resolver dudas.